martes, 14 de abril de 2015

¿Necesitamos una reforma fiscal para los emprendedores?


A lo largo de nuestra vida hemos escuchado que las empresas son el motor de la economía, lo cual es totalmente cierto.  Sin embargo, en España se acentúa esta situación, ya que podríamos reducir el concepto de empresas a pequeñas y medianas, las cuales conforman alrededor 99,88% del tejido empresarial. Y es aquí cuando nos preguntamos ¿Por qué en España cuesta tanto emprender?

 A continuación, realizaré un breve resumen de los grandes obstáculos que tienen que enfrentarse este colectivo, problemas que posiblemente sonarán mucho en este año de elecciones.

En primer lugar, y como principal problema la mayoría de emprendedores destacan el difícil acceso a la financiación, ya que las Pymes son consideradas como entidades de alto riesgo y requieren de altos costes por parte de los bancos para realizar estudios de crédito,  de manera que éstos prefieren desviar sus recursos a organizaciones de mayor tamaño. Además, a esto hay que añadirle la gran burocracia que hay que llevar a cabo para montar la empresa y los grandes costes asociados.

Por otra parte, y como tema más llamativo para conocer este entramado mundo de las empresas son las grandes barreras que establece España para la cotización al inicio de la actividad económica.  En España, los autónomos son regulados por el Régimen Especial de Trabajadores Autónomos (RETA). Como característica de este régimen es que se cotiza con respecto a unos mínimos y máximos, y no en función de las rentas reales.  Al iniciar una actividad económica en territorio nacional tenemos que cotizar, con un pago mínimo de 255.86 independientemente de los ingresos que se obtengan, los cuales pueden ser hasta negativos.

Realizando una breve comparación con algunos de los países europeos como el caso de Francia, observamos que no se paga absolutamente nada en el primer año y el abono mensual es de 49 €. Además, en el caso de empresas individuales, artesanales, comerciales o liberales los trámites para la creación de empresas se simplifican. Respecto a Alemania se paga 140 € en concepto de Seguridad Social, y se le puede eximir de este pago a los empresarios que no alcancen los 1700 € netos al mes. Por último, y como polo opuesto encontramos Inglaterra en la cual se pagarían únicamente 12€ en caso de que las ganancias no sean superiores 5.595 libras ( 7.747€).

¿Realmente queremos incentivar a los emprendedores? Con esto dejamos claro, que lo único que motivamos son las grandes inversiones, coherentemente y económicamente es lo correcto, ya que son los que generan un mayor movimiento de capital. Pero… ¿Y nuestro 99.8% de Pymes? Sin ninguna duda deberíamos modificar este régimen porque nos estamos cargando a la gran mayoría de nuestros emprendedores, y más en tiempos difíciles como estos en los que emprender ya es un gran hito.


A.A.

No hay comentarios:

Publicar un comentario