El poder de la Energía

           Como bien es sabido por todos, España es un país con un fuerte atractivo energético, principalmente a través de la instalación de elementos productores de energías renovables (destacando la importante cantidad de energía solar captada en el Sur, o el potencial del viento en las Costa Atlántica). Todo ello suena a un bonito 'cuento con final feliz', pero no es así. No sólo tenemos un Gobierno que nos exprime; también el oligopolio de las grandes empresas energéticas, las cuales mantienen una constante presión sobre el 'círculo de poder' con el fin de elevar los precios.

            

           Ayer lunes saltaba la noticia en los principales diarios económicos de que la Organización FACUA exige al Gobierno mayor responsabilidad ante las subida en el precio de la luz (en el primer trimestre de 2015) en un 12,7%. Cuando cada día leo los periódicos y observo estos titulares con regularidad pienso: "Y OTRA VEZ CON LA MISMA 'CANTINELA'." Y es así. Parece que el tira y afloja entre el Gobierno y las Eléctricas no tiene un fin marcado. Mientras, a lo largo de esa 'cuerda', que se tensa más que afloja, se encuentran en torno a 47 millones de personas que, serán víctimas de las prácticas oligopolísticas de los mandates de la Energía.

           

           Si hacemos memoria, el 23 de Octubre del pasado año, se promulgó una Sentencia por el Tribunal de Justicia de la Unión Europea como respuesta a la denuncia con respecto a falta de protección de los consumidores de electricidad y gas en España y de no realizar los comunicados pertinentes ante nuevas subidas en la tarifa. En ella, se afirma que, respondiendo a la 'obligación general de suministro los consumidores de gas y electricidad deberían ser informados en tiempo oportuno de los precios, motivos, condiciones y alcance de la subida tarifaria'.  Como era de esperar, el Ejecutivo todavía no ha hecho frente a dicha sentencia, y dudo que lo haga, aunque en época pre-electoralista nos podemos llevar muchas sorpresas.

            

            Es por ello que, surjan de forma privada proyectos de instalación de placas fotovoltaicas y pequeños aerogeneradores para suplir un gran porcentaje del gasto en consumo de energía. Todo esto sería ideal si no se viera truncado por las multas impuestas desde las altas esferas a estos pequeños consumidores, siendo así como nos obligan a pasar por el 'aro'. Además, la reforma retroactiva realizada por el Gobierno al sector de la Energía Solar ha supuesto pérdidas en torno al 36%, mientras que sólo un 3% ha gozado de aquella rentabilidad que prometían 'los señores de traje y corbata'. Es así como culpabilizan a este sector del elevado coste del sistema eléctrico español. Ello demuestra el alto grado de cinismo que poseen los 'buitres de la energía', quienes se sacian con sobrerretribuciones y que en época de crisis éstas supongan un volumen de beneficios inaudito.  

            Como ciudadanos es nuestro deber exigir un  mayor compromiso a aquellos que se sientan a negociar sobre nuestro futuro 'energético'. Y ya no sólo nos debe preocupar el si nos cobran más o menos, sino el plantearnos el verdadero significado de la palabra 'sostenibilidad'. Y una de las formas de ser sostenible es promover, entre otras, nuevas formas de autoabastecimiento mediante las energías renovables. De esta forma, acabaríamos con el poder del grandioso imperio de las eléctricas, y por tanto, daríamos un respiro más a todos los trabajadores que con su esfuerzo, hacen que este país cada día avance un pasito más. 

G.V.L